«ACNUR apoya la participación activa de los refugiados y de los desplazados internos en las negociaciones de paz. Opinamos que las víctimas deberían tener acceso a las negociaciones tal y como hicieron con el diálogo con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC)», dijo en una rueda de prensa el portavoz de la entidad, Adrian Edwards.
En el marco del diálogo entre el Gobierno y las FARC, unos sesenta desplazados participaron en las negociaciones.
El pasado 30 de marzo el Gobierno de Colombia y el ELN anunciaron que empezarían negociaciones de paz formales para intentar acabar con más de medio siglo de conflicto.
Edwards dijo que ACNUR se congratula de esta decisión e instó a dar mayor importancia y visibilidad a los desplazados forzosos por el conflicto.
Tras Siria, Colombia es el segundo país en el mundo con la mayor población desplazada.
Unos 6,7 millones de colombianos son desplazados internos en su propio país -un 13 % de la población total- a los que hay que sumar unas 360.000 personas que son refugiados en países terceros, principalmente Ecuador y Venezuela.
«ACNUR considera que un resultado positivo de las negociaciones permitirá la integración de los desplazados y el retorno de los refugiados», señaló Edwards.
Mientras esto no ocurra, ACNUR seguirá ayudando a los desplazados y a los refugiados y solicitando a la comunidad internacional que continúe con su apoyo.
