«Obviamente, además de los heridos, no nos podemos olvidar de que Ecuador ya había alertado de casos de zika, dengue y chikunguña, por lo que es importante trabajar con las autoridades para controlar la población de mosquitos, especialmente en las inmediaciones de los refugios para los que se han quedado sin hogar», dijo el portavoz de la OMS en Ginebra, Tarik Jasarevic.
Agregó que aunque no es muy frecuente que los brotes de este tipo de enfermedades, trasmitidas por mosquitos, aumenten tras un terremoto, el agua estancada y las deficiencias sanitarias de los refugios para los desplazados son el entorno idóneo para su propagación.
UNICEF mostró su preocupación por la situación sanitaria, por la disponibilidad y calidad del agua y por las condiciones de saneamiento, especialmente en las zonas costeras, que son consideradas focos de las tres enfermedades, indicó por su parte el portavoz de esta organización, Christopher Boulierac.
El terremoto, que ocurrió la noche del sábado con epicentro en la localidad de Pedernales, tuvo una magnitud de 7,8 en la escala de Richter y ha causado al menos 413 muertos y más de 2.000 heridos, según cifras oficiales.
Para hacer frente a la crisis y ante la petición de ayuda que formuló el Gobierno ecuatoriano, varias agencias especializadas de la ONU han movilizado a sus efectivos sobre el terreno y han comenzado a enviar equipos de especialistas en ayuda de emergencia.
La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) indicó por su parte que ha desbloqueado 100.000 dólares de sus fondos de emergencia para esta catástrofe, mientras que la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) enviará en las próximas horas cargamentos con ayuda humanitaria para los desplazados.
Respecto a la ayuda sanitaria, la OMS señaló que por el momento Ecuador ha notificado que cuenta con los recursos necesarios.
«En casos de terremoto la prioridad es atender a los heridos por los derrumbes, por fracturas, así que es importante contar con la capacidad quirúrgica suficiente», explicó Jasarevic.
Por el momento, Ecuador ha indicado que cuenta con la capacidad suficiente en este ámbito, «pero esto desgraciadamente puede cambiar a medida que el número de heridos aumenta».
«Si esto ocurre, la OMS coordinará con el ministerio de Sanidad para enviar equipos médicos adicionales con la capacidad necesaria para operar de manera autosuficiente», concluyó.