Las labores de supervisión estarán concentradas fundamentalmente en las nuevas zonas de reagrupamiento de los guerrilleros, donde permanecerán hasta que sea firmado el nuevo pacto entre representantes gubernamentales y de ese movimiento rebelde, el principal involucrado en la guerra interna.
El objetivo es que sean visitados los sitios en los cuales estarán temporalmente ubicados los miembros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP), hasta tanto entren en vigor los proyectados puntos y zonas de transición, allí deberán abandonar las armas y prepararse para la reincorporación a la vida civil, precisó Caracol Radio.
El pasado 26 de septiembre el presidente Juan Manuel Santos y el líder de las FARC-EP, Timoleón Jiménez, suscribieron en Cartagena de Indias el llamado Acuerdo Final con el que se comprometieron a terminar un largo conflicto bélico.
Pero con el triunfo del No en el plebiscito, convocado para validar por la vía popular dicho documento, se abrió un debate con simpatizantes del voto negativo y otros sectores con vistas a un eventual ajuste del conjunto de convenios, último proceso ya en marcha en la capital cubana.
No obstante la incertidumbre surgida tras los resultados de dicho ejercicio democrático, el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas autorizó la permanencia aquí de la comisión política conformada por observadores no armados de países latinoamericanos y caribeños.
A fin de evitar retrocesos luego de la implementación del cese el fuego bilateral, el Ejecutivo y las FARC-EP acordaron aplicar un grupo de medidas y así prevenir incidentes en tanto pasan de las condiciones actuales al dispositivo previsto inicialmente para mantener el silencio de los fusiles por tiempo indefinido.
La delegación de la ONU forma parte del mecanismo tripartito de verificación, compuesto además por integrantes de esa guerrilla y del Gobierno.
A partir de ahora serán visitados los puntos de reagrupamiento de las FARC-EP así como estructuras en terreno de la Fuerza Pública, comentó a Caracol Radio el vocero guerrillero Marcos Calarcá quien ratificó la disposición de ese grupo para cumplir lo pactado con la contraparte.
Los delegados del gobierno de Colombia y de las FARC, principal guerrilla del país, revisaron la víspera temas de la reforma rural y justicia transicional para alcanzar un nuevo acuerdo que permita superar un conflicto armado de medio siglo, informaron fuentes oficiales.
«Hemos revisado el punto uno de la reforma rural integral, con una serie de precisiones, de ajustes, en la línea de lo que nos ha llegado de la sociedad colombiana», indicó el jefe negociador del gobierno, Humberto de la Calle, desde La Habana en un video divulgado en Bogotá.
«Esta mañana tocamos algunos aspectos de la jurisdicción especial para la paz, que es un tema trascendental y creo que hemos hecho un buen trabajo. Hemos logrado algunas aproximaciones importantes», agregó.
De la Calle viajó la víspera a Cuba, sede desde hace casi cuatro años de las negociaciones con la FARC-EP con la orden del presidente Juan Manuel Santos de entrar en modo cónclave hasta llegar a un nuevo acuerdo de paz.