Con este acuerdo se facilitan las rutas aéreas entre los dos países, lo que permitirá bajar los costos, tanto para la carga como para turistas.
Este valor agregado atrae mayor inversión e incrementa el mercado turístico. Fabricio Villamar, integrante de la Comisión de Relaciones Internacionales, expuso el informe que preparó esta mesa.
Resaltó que el documento es una oportunidad para Ecuador, puesto que propicia beneficios mutuos en el turismo y comercio. Argumentó que posibilita el ingreso de recursos frescos al país.
Según el informe, el fortalecimiento de las relaciones comerciales tienen, a su vez, efectos beneficiosos sobre el resto de actividades de la economía.
En la actualidad, los productos con mayor potencial en el mercado canadiense son el mango, la pitahaya, el brócoli y las flores. Con la creación de estas conexiones también se busca el incremento de turistas canadienses, que en el 2014 fueron más de 33 mil, mientras que en lo que va de este año han llegado unos 15 mil.
«El propósito es que el turismo se convierta en la primera actividad económica no petrolera», enfatizó Esther Cuesta, vicepresidenta de la Comisión de Relaciones Internacionales.
Para la asambleísta, el convenio tiene que ver con el objetivo 17 de la Agenda de Desarrollo Sostenible, sobre la necesidad de realizar alianzas entre gobiernos para adoptar medidas encaminadas a movilizar, reorientar y aprovechar billones de dólares de recursos privados con el objetivo de generar transformaciones.
Fuente: El Telégrafo