Se trata de elementos de las culturas Valdivia, Guangala y La Tolita que fueron sacadas ilegalmente de Ecuador y comercializadas en locales y casas particulares.
Según la Cancillería argentina, entre los elementos recuperados hay vasijas silbadoras, esculturas eróticas, apoyanucas, pipas, cinceles, botellones, adornos, piezas textiles y objetos de artesanía de cerámica, oro y hueso.
En el conjunto figuran piezas de la cultura Valdivia (de la costa sur ecuatoriana) cuya antigüedad se estima entre los 3.500 y 1.800 años antes de Cristo, además de figuras de las culturas Tuncahuan, Chorrera (900-300 años antes de Cristo) y Bahía (500 años antes de Cristo a 650 años después de Cristo), añadió la fuente.
Se incluyen objetos pintados en técnica de negativo de gran singularidad.
La canciller de Argentina, Susana Malcorra, quien participó en el acto de restitución en la sede de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), en Quito, expresó su satisfacción por la devolución de las piezas y por «poder demostrar que se puede trabajar contra el tráfico ilegal, incluyendo el de patrimonios culturales».
«Podemos hacerlo en conjunto», señaló la titular argentina de Relaciones Exteriores al asegurar que la unidad es la única manera de afrontar la acción de las «mafias que se encargan de traficar con todo: personas, drogas y también el patrimonio, atentando contra el mantenimiento de nuestra historia y sus valores», afirmó.
El canciller ecuatoriano, Ricardo Patiño, destacó que esta restitución es una muestra de los mecanismos de cooperación que se han construido gracias a políticas culturales como la reciente suscripción de un convenio bilateral entre Argentina y Ecuador para la prevención y lucha contra el tráfico ilícito y restitución de bienes patrimoniales.
«Hoy podemos aseverar que nuestros esfuerzos conjuntos dan buenos resultados, estamos encaminados en la lucha ferviente para la protección de nuestros bienes culturales y para que el patrimonio sustraído retorne a casa», aseveró el canciller ecuatoriano.