El cine de Boca Ratón, Florida, fue el escenario de un emotivo regreso a casa para Ariana Grande, quien celebró un momento profundamente nostálgico junto a su abuela, Marjorie “Nonna” Grande, en una proyección privada de la película “Wicked”, donde interpreta a Glinda la Buena.
Este encuentro se llevó a cabo en honor a Nonna, quien cumplió 99 años en octubre, y estuvo impregnado de significados personales para la artista.
“Volé a Boca por un día para mirar con Nonna”, expresó Grande en sus redes sociales, compartiendo con sus seguidores este evento cargado de emociones.
La elección del lugar fue simbólica. Ariana recordó que ese cine fue un refugio durante su infancia, un espacio donde solía acudir cada fin de semana con su familia.
En la proyección, Ariana estuvo acompañada por su hermano, Frankie Grande, y por su abuela, en un ambiente íntimo que resaltó la importancia de los lazos familiares.
Este gesto reflejó su compromiso de conectar sus logros artísticos con sus raíces y de compartir esos hitos con quienes más significan en su vida.