«Creo que el porno es una vergüenza. Solía ver mucho, para ser honesta. Empecé a ver porno cuando tenía como 11 años», contó la cantante ganadora del Grammy en el programa «The Howard Stern Show» de la radio Sirius XM.
«Creo que realmente destruyó mi cerebro y me siento increíblemente devastada por haber estado expuesta a tanta pornografía», agregó, y dijo que incluso sufría pesadillas porque parte del contenido que veía era muy violento y abusivo.