Unas 1 966 municiones, calibre 7.62 milimetros, fueron descubiertas a bordo de un automóvil particular que se movilizaba por la parroquia de Lita, provincia de Imbabura, cerca a la frontera con Colombia.

Miembros de las Fuerzas Armadas detuvieron al conductor del vehículo e incautaron las balas de fusil, mientras realizaban un control de rutina.

Según el coronel Pablo López, oficial de Inteligencia del Comando Operacional 1 Norte, todo parece indicar que el material de uso militar estaba dirigido a los grupos ilegales armados de Colombia.