Mañana se conocerán la mayoría los resultados de una jornada de votación a la que estaban llamadas cerca de 45 millones de personas y que transcurrió sin incidentes destacables.
A nivel nacional, los comicios se interpretarán como el primer examen en las urnas del líder laborista, Jeremy Corbyn, que tomó las riendas del primer partido de la oposición en septiembre.
También se leerán como un indicador del apoyo que mantiene el primer ministro, el conservador David Cameron, a menos de dos meses del referéndum sobre la permanencia del Reino Unido en la Unión Europea (UE).
En Londres, uno de los principales focos de atención en estas elecciones, el laborista Sadiq Khan, con ventaja en las encuestas, espera ser elegido como el primer alcalde musulmán de la capital británica.
Su principal rival es el conservador Zac Goldsmith, que aspira a suceder en la alcaldía a su compañero de partido Boris Johnson.
Además del primer edil de Londres, se elegirán alcaldes en las ciudades inglesas de Bristol, Salford y Liverpool.
En Escocia, los ciudadanos deberán votar a los 129 miembros del Parlamento autónomo, de los que 69 escaños están en manos del Partido Nacionalista Escocés (SNP), 37 del laborismo y 15 de los conservadores, mientras que el resto se reparte entre otras formaciones.
Los galeses elegirán a los 60 miembros de la Asamblea, en la que los laboristas son mayoría, con 30 escaños, en tanto que los conservadores tienen 14, el partido galés Plaid Cymru cuenta con 11 y el resto es de otras formaciones británicas.
En Irlanda del Norte, se reparten los 108 integrantes de la Asamblea autónoma, en la que 38 escaños correspondían hasta ahora al Partido Democrático Unionista (DUP), 29 al republicano Sinn Fein, 16 al Partido Unionista del Ulster, 14 al Partido Liberal Demócrata y Laborista del Ulster (SDLP) y el resto están en manos de otras fuerzas políticas.