Asimismo, extendieron sus condolencias a los familiares y allegados de los uniformados que perdieron la vida, y al pueblo ecuatoriano por esta tragedia aérea, según recoge un comunicado de la Cancillería.
Los 22 soldados murieron ayer cuando el avión en el que se desplazaban, un «Aravá» matrícula E206, sufrió un percance por causas que todavía son investigadas.
En total, fallecieron 19 paracaidistas que realizaban un curso de maestros de salto, dos pilotos y un mecánico.