El propietario del restaurante Playita Mía, Carlos Valladares, destacó que en 72 horas contaron con todos los servicios básicos. Tras remover escombros, habilitaron su negocio.
De igual manera lo hizo Silvia Loor, quien tiene un pequeño puesto de venta de celulares y accesorios. Ella con su vitrina atiende a sus clientes. Por su parte, el comerciante Rubén Mendoza destacó que el manabita es trabajador. “No podemos quedarnos así, tenemos que seguir trabajando”, apuntó.
Sin embargo, los esfuerzos de estos manabitas no están solos, pues el Gobierno Nacional trabaja la delineación de un plan efectivo para reactivar la economía en Manabí, que permitirá sostener el empleo e impulsar la producción.
“Las naciones fuertes surgen de los momentos difíciles y este es el momento de Ecuador”, manifestó el vicepresidente Jorge Glas.
