Todo empezó cuando la artista compartió en sus redes sociales una fotografía en blanco y negro en la que lucía completamente desmejorada y demacrada y la cual desató las alarmas por su bienestar ente sus seguidores y amigos.
La impactante foto de Amaia Montero tras salir de la clínica en la que estuvo un mes: a la salida se reencontró con su hermana para volver a casa
La fotografía, que al parecer ha sido eliminada porque ya no se encuentra disponible en su perfil de Instagram (@amaiamonterooficial), estaba acompañada del mensaje “Si la esperanza es lo último que muere y aún no la he perdido, ¿de qué me sirve la vida?”. Y respondía con un “destruida” a la pregunta de cómo se encontraba.
Esta fue la fotografía que encendió la preocupación por el estado de salud de la cantante Amaia Montero. La vocalista compartió la instantánea en redes sociales, pero a la fecha ha sido eliminada.
Unos días después, la cantautora ingresaba en una clínica de Navarra, donde ha permanecido internada durante un mes.
Desde ese momento, su familia prefirió permanecer hermética, aunque su única hermana, Idodia Montero, compartió atisbos de lo que ocurría con la querida cantante, refiriendo que no se encontraba “bien” o que estaba “un poco mejor” cuando era abordaba por la prensa.
No obstante, según un informe de revista ¡HOLA! ahora se conoce cuál fue el motivo del ingreso hospitalario de Montero. Aparentemente, todo se debió a un fuerte cuadro de estrés y ansiedad debido a los preparativos de su nuevo proyecto discográfico, que tenía previsto publicar a comienzos de 2023.
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Se dice que los médicos le habían recomendado tranquilidad absoluta, reposo, silencio y desconexión. Hace una semana exactamente Amaia fue dada de alta y aunque su apariencia no ha mejorado dell todo, en estos momentos la intérprete se está apoyando en su familia.
A ese apoyo se han sumado voces solidarias de sus conocidos, como la de su expareja, Gonzalo Miró (con quien terminó en 2011). Es la última relación conocida de la intérprete de Rosas y La playa.
Los especialistas de farándula suponen que la muerte del padre de Montero, a los 58 años de edad, después de luchar contra un cáncer, también supuso un durísimo golpe para la cantante, que por lo visto, sigue sin superar.
