El acuerdo permitirá además generar un mecanismo de coordinación de cumplimiento de sentencias que contemplen medidas de reparación; diseñar un manual sobre derechos y procedimientos dirigido a la sociedad civil; y crear una metodología de laboratorio de resoluciones.
“Es una batalla que hay que seguir librando, pero ya hay estrategias, hay una línea que seguir para el acceso a la justicia y el combate a la impunidad. Es un tema de valores que pasa por una serie de acciones, desde la educación preventiva hasta las sanciones”, afirmó optimista Jalkh.
En tanto, Pizanni dijo que el reto de ONU Mujeres en este año es profundizar la lucha contra la impunidad. Por ello, ese organismo brindará al CJ el apoyo técnico y financiero necesario para que implemente una política de reparación adecuada a las víctimas de la violencia.
“Los Estados en general tienen que hacer grandes inversiones en el tema de sancionar porque no hemos sido lo suficientemente buenos en el tema de prevenir, debemos apuntar a las dos cosas”, sostuvo.
Ambas autoridades coincidieron en que se debe eliminar estereotipos que están completamente arraigados en nuestra sociedad. Y recordaron que en una relación de pareja no se puede asumir comportamientos violentos como si fuesen normales.
En este sentido, Jalkh destacó la importancia de la campaña HeForShe implementada por ONU Mujeres para que tanto hombres, como mujeres cambien de visión y no permitan la violencia en ningún ámbito.
En el país, 2045 operadores de justicia entre jueces, fiscales, defensores públicos, secretarios y ayudantes judiciales, fueron capacitados durante 2015 en temas que tienen que ver con la erradicación de la violencia contra la mujer y la familia. Para este año se prevé capacitar a 800.