Con sólo 11 años, Daniel Radcliffe protagonizó Harry Potter y no tuvo un viaje de regreso a la vida normal. El actor, que hoy tiene 33 años, ha revelado que quiere evitar el mismo destino que tuvo para sus hijos, manteniéndolos lejos de la fama.

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Es indiscutible que Radcliffe es reconocido a nivel mundial, siendo la saga basado en los libros de J.K. Rowling una de las más populares de la historia.

Y tal ha sido la repercusión de la fama en su vida que la estrella británica ha afirmado que sus luchas con la fama desde la infancia lo han llevado a cambiar su forma de criar a sus hijos algún día.

El actor habló con Newsweek, junto a su co-protagonista de Weird: The Al Yankovic Story, Evan Rachel Wood. Allí, Radcliffe afirmó que, aunque aún no los tiene, quiere que sus hijos tengan la posibilidad de los “platós del cine”.

El británico dijo que, aunque “claramente” todavía disfruta de la actuación, insistió: “No querría la fama para mi hijo“.

“Creo que si puedes conseguir una situación en la que estás en los sets de filmación sin necesariamente [pensar] ‘oh, esto será un gran problema en tu vida’, eso es genial”.

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