David Bowie le dejó la mayor parte de su fortuna a su esposa, Iman, y a sus dos hijos, Duncan y Alexandria, según el testamento de 20 páginas archivado en 2004.

Bowie, quien usó en el testamento su nombre de nacimiento David Robert Jones, tenía una fortuna estimada de 100 millones de dólares, según el diario The New York Times. Bowie fue generoso igualmente con otros seres queridos. Su asistente personal, Corinne ‘Coco’ Schwab le dejó 2 millones de dólares, y a Marion Skene, niñera de Jones, le dejó 1 millón.