El Primer Mandatario, Rafael Correa, expresó que la deuda pública es el menor de los problemas que posee el Ecuador, que ocupa el séptimo lugar como país menos endeudado de la región, por debajo de varias naciones como Brasil, Uruguay, Colombia, entre otros.

El promedio de endeudamiento de los países de Europa miembros de la Organización para Cooperación  del Desarrollo Económico (OCDE)  en el 2015, fue de 120% del Producto Interno Bruto (PIB). El promedio de América Latina es de 37,6%; mientras que el de Ecuador se ubica en el 33%, es decir, debajo del promedio, lo que al mismo tiempo posiciona al país como el séptimo menos endeudado de América Latina.

El Jefe de Estado defendió la inversión en obras y detalló que por ejemplo en las nuevas hidroeléctricas  hay más  de 200 millones de dólares en ahorro, con lo cual se ratifica que es falso que haya crisis y endeudamiento.

Comentó que el país antes compraba electricidad a barcazas que pertenecían a la oligarquía -socialcristiana, por ejemplo-  y a políticos ecuatorianos, que por conservar su negocio, no impulsaban la construcción de hidroeléctricas.

Para cambiar realidades como esta, es que se empezó a invertir en obras que en el futuro van a generar liquidez para que futuros gobiernos tengan menos problemas económicos que el actual.

Reiteró que Ecuador tiene una gran cantidad de activos acumulados y, si bien existe un problema a corto plazo de liquidez, lo cierto es que la inversión efectuada  permitirá tener liquidez en el futuro.

Finalmente, rechazó la tesis de sectores de la oposición que afirman que el país está hipotecado. Por eso recordó que cuando se atenta contra los principios económicos, no se hace daño al gobierno, sino a la sociedad.

De igual forma, pidió conclusiones serias y responsables;  a favor de la verdad y de la rigurosidad académica.