El carnaval de Río de Janeiro se convirtió hoy en un instrumento de protesta, en clave musical, por la forma en la que se han organizado los Juegos Olímpicos que esta ciudad brasileña albergará el próximo agosto.

El grupo Ocupa Carnaval, que sale a las calles de Río tocando canciones con letras contestatarias usando músicas tradicionales del carnaval carioca, divulgó hoy una tonadilla para denunciar que las olimpiadas no traen beneficios a la población.

«Si piensas que la antorcha es nuestra, la antorcha no es nuestra. No. La antorcha es de las constructoras. No sobra nada para el pueblo», decía el estribillo de la canción.

En otra estrofa, el Ocupa Carnaval alega que las olimpiadas «sólo sirvieron para embolsar» dinero por parte de las constructoras que se han encargado de las numerosas obras de infraestructura y de la construcción de las instalaciones deportivas y los hoteles que han sido necesarios para el evento.

Sirviéndose de otra canción tradicional del carnaval de Río, el grupo criticó la contaminación de la bahía de Guanabara, donde se realizarán las competiciones de vela.

«Rema, rema, rema, remero, en la bahía sucia de deshechos», dice la canción del Ocupa Carnaval, grupo que aspira a «contagiar» el carnaval con las reivindicaciones de los movimientos populares.