La Audiencia de Barcelona condenó al exfutbolista brasileño Dani Alves a cuatro años y medio de cárcel por agredir sexualmente a una mujer en un club nocturno de Barcelona. De su lado, Alves negó los cargos y podrá apelar la sentencia.
Además del tiempo en la cárcel, se le impusieron cinco años de libertad vigilada y nueve de alejamiento de la víctima, a la que deberá indemnizar con 150.000 euros.
Los hechos por los que se le condena ocurrieron el 31 de diciembre de 2022. La Fiscalía dijo que Alves y un amigo habían comprado champaña para tres mujeres jóvenes antes de llevar a una de ellas a la zona VIP de la discoteca Sutton, donde había un baño que la víctima desconocía.
Es en este momento cuando, según la parte acusadora, la situación se volvió violenta, forzando a la mujer a tener sexo a pesar de pedir marcharse repetidamente. La mujer dijo que el acto le causó «angustia y terror». Una de las amigas que estaba con ella describió cómo la víctima, de 23 años, había llorado «desconsolada» tras dejar el aseo.
Según la Audiencia, Alves «cogió bruscamente» a la mujer, la tiró al suelo e, impidiendo que pudiera moverse, continuó a pesar de «que la denunciante decía que no, que se quería ir».
El exfutbolista argumentó que la mujer podría haberse ido «si hubiera querido».
En un comunicado, la Audiencia dijo que había evidencias más allá del testimonio de la demandante que probaban que había sido violada.
Alves, de 40 años, es uno de los futbolistas más condecorados de la historia, con un prontuario que incluye decenas de títulos nacionales e internacionales como 2 Copas Américas y sus Olimpiadas con Brasil, 3 Ligas de Campeones y 6 Ligas españolas con el Barcelona.
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