Castro recomendó en una rueda de prensa que los medios de comunicación sigan difundiendo la noticia de la venida del papa, pero «con precisión», para «evitar despertar falsas expectativas en la gente».
Monseñor Castro, que es arzobispo de Tunja, se refirió especialmente a la expectación que ha causado en el país la posible inclusión en la gira papal de Quibdó, capital del departamento selvático del Chocó, uno de los más pobres del país.
«Nunca dije que el papa va a ir a Quibdó», sino que «posiblemente» se incluya esa ciudad del Pacífico en la visita.
«En el marco de las posibilidades, especialmente sí; Quibdó es una zona pobre, donde hay minorías étnicas significativas, y pues lo más posible es que vaya; decir eso es una cosa y otra es decir ‘el papa va a ir a Quibdó'», explicó.
Sobre las fechas de la visita, confirmada el pasado sábado por Castro tras una reunión en El Vaticano, explicó que están por precisarse.
«Quedamos en que en el primer semestre del año entrante se podrá hacer la visita; eso ahora hay que organizarlo junto con los demás compromisos del papa para definir los días precisos, que todavía no están definidos», relató.
Sobre los preparativos que hará la iglesia colombiana, Castro dijo que la visita será «uno de los puntos más importantes» a tratar en la asamblea del episcopado que se celebrará en febrero próximo.
La Conferencia Episcopal tampoco ha mantenido diálogos con el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, para discutir los planes de acogida al pontífice.
«No, aún no me reúno con el presidente, y tengo que hacerlo cuanto antes, es justo y necesario», declaró Castro.