Augusto Barrera, exalcalde de Quito, en entrevista en Notimundo a la Carta, con Marcela Holguín, señaló que mira con satisfacción que se hayan leído, al menos una parte, los estudios del Metro de la capital y que se dé una señal para el inicio de la construcción de la segunda fase. Sin embargo, aclaró que le duele ver que la primera fase está prácticamente escondida, en relación a las dos estaciones que están listas y que son claves para el funcionamiento de este medio de transporte. «Esta administración se pasó un año y medio hablando mal del proyecto y criticando los estudios anteriores, diciendo que son muy baratos», dijo.
Barrera manifestó, además, que la brecha financiera de 500 millones de dólares del proyecto, que hace que no cueste 1.500 sino 2.000 millones, nace de dos rubros sustantivos. Primero, por costos indirectos, que se relacionan con la ganancia a la que aspira la empresa, el cálculo de los riesgos del proyecto y los gastos administrativos. Segundo, por el costo de la tuneladora que es el rubro que más se eleva en la propuesta económica entre los costos directos. «Ese famoso incremento no es porque estuvo mal hecho el estudio. El alcalde actual estaba obligado a negociar la propuesta más barata», reiteró el exfuncionario, quien señaló que es hora de tener un liderazgo cierto y asumir las responsabilidades que hay que asumir.