Con el objetivo de fomentar principios y valores éticos entre los servidores de la Institución, desde el pasado 14 de enero se aplica en la Fiscalía General del Estado, el Código de Ética de la Función Judicial del Ecuador, expedido por el Consejo de la Judicatura.

Es así que las personas que se vinculen como servidores, en el momento de su posesión deberán aceptar por escrito el compromiso de desempeñar sus funciones y actividades, bajo el amparo de las disposiciones legales, principios, valores y procedimientos descritos en la Constitución de la República, en el Código Orgánico de la Función Judicial y en el Código de Ética de los servidores y trabajadores de la Función Judicial.

Además, los funcionarios, que a la fecha de expedición de esta resolución se encuentran laborando en la institución, deberán también suscribir el mencionado compromiso.

Con la implementación de este Código, se busca prevenir la práctica de conductas antiéticas que podrían derivar en actos de corrupción en el ejercicio de las funciones de los servidores judiciales.

Otro de los propósitos es impulsar la transparencia, integridad y eficiencia de las actividades que se ejecutan en la Función Judicial para alcanzar la excelencia en la prestación del servicio de justicia a la ciudadanía.

Los principios y valores éticos que se quieren promover son: independencia,  imparcialidad, integridad, transparencia, diligencia, respeto, capacitación y conocimiento y servicio.

La independencia, quiere decir que los integrantes de la Fiscalía como parte de la Función Judicial  deberán actuar en todo momento de manera autónoma. Sus decisiones deberán estar libres de influencias económicas, políticas, sociales, de amistad o parentesco.

No deberán ejercer actos de proselitismo político en los que se comprometa la utilización de sus funciones o la infraestructura  institucional.

Los integrantes de la Función Judicial deberán desempeñar sus funciones con imparcialidad respetando la igualdad ante la Ley. Deberán evitar favoritismos, predisposiciones o prejuicios.

Los servidores  de la Función Judicial deberán actuar en su vida pública y privada  con rectitud, integridad y honradez. Esto quiere decir que en ningún caso podrán aceptar o solicitar recompensas, dádivas, regalías o presentes por si mismo o por un tercero.

Además, no podrán utilizar su cargo para favorecer a sus intereses privados, los de su familia o los de cualquier otra persona.

Asimismo, los servidores de la Función Judicial desempeñarán sus funciones  con transparencia, precautelando el derecho al acceso a la información pública.

Según este Código, los servidores de la Función Judicial deberán actuar con diligencia, compromiso y colaboración permanente y evitar todo tipo de retraso injustificado, a fin de cumplir ágilmente con las tareas asignadas.

Otro de los valores que se impulsará entre los funcionarios son el respeto y la tolerancia para reconocer los derechos de todos los individuos y no lesionar la dignidad de los demás.

Así también, los servidores de la Función Judicial deberán fomentar la capacitación y el conocimiento, lo que favorecerá al correcto desempeño de sus labores.

Finalmente, los funcionarios deberán reconocer la importancia del servicio de justicia para la sociedad, por lo que deberán tratar con amabilidad  y cortesía a todos los usuarios del sistema de justicia.

Cabe aclarar que la inobservancia de los principios y valores éticos establecidos en este Código será sancionada de acuerdo con lo estipulado en el ordenamiento legal vigente y será parte de la evaluación de desempeño de los servidores de la Función Judicial.