Francia pidió hoy a Panamá aumentar la cooperación en temas fiscales para poder eliminarlo de su lista de países que no cooperan en ese área, mientras que el Gobierno chino reaccionó por primera vez al escándalo causado por los documentos filtrados de una firma panameña, que afectan a 9 líderes del país.
Las revelaciones publicadas por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ, en inglés), con sede en Washington, sobre miles de empresas y activos opacos creados en numerosos países a través del bufete panameño Mossack Fonseca continuaron hoy generando reacciones en todo el mundo.
El presidente de Francia, François Hollande, habló hoy por teléfono con su homólogo panameño, Juan Carlos Varela, para explicarle por qué incluyó de nuevo a ese país centroamericano en la lista francesa de paraísos fiscales este martes, tres días después de que salieran a la luz los llamados papeles de Panamá.
Esa actuación causó una dura reacción de las autoridades panameñas, por lo que Hollande decidió telefonear a su homólogo para rebajar las tensiones y animarle a «responder a las peticiones de información de las autoridades fiscales francesas», según indicó la presidencia gala en un comunicado.
El ministro francés de Finanzas, Michel Sapin, firmó hoy el decreto que incluye a Panamá en la lista de países no cooperativos, lo que tiene consecuencias para quienes hagan transacciones con esa nación, y recordó que desde 2015 el Gobierno panameño no informa a Francia sobre las sociedades registradas allí y sus beneficiarios.
Tras la filtración de los papeles de Panamá, que afectan a más de 140 políticos y empresarios de todo el planeta, el Gobierno panameño ha defendido sus «altos estándares de transparencia» y ha prometido seguir evaluando sus sistemas financiero y fiscal.
En su conversación con Hollande, Varela se comprometió a implementar de manera «efectiva» el acuerdo vigente entre ambos países para evitar la doble imposición fiscal y facilitar el intercambio de información y acordaron una próxima reunión en París de sus ministros de Economía.
También en París se reunirán el próximo miércoles expertos de todo el mundo convocados por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) para estudiar las modalidades de mejora de la transparencia fiscal entre países, según anunció hoy ese organismo.
Mientras, China rompió su silencio sobre el escándalo a través de su ministro de Asuntos Exteriores, Wang Yi, quien hizo el primer comentario oficial después de varios días en los que cualquier noticia sobre el tema había sido censurada en el país.
«Tenemos que averiguar primero qué ha pasado exactamente», afirmó Wang en una conferencia de prensa en Pekín, donde aseguró que la campaña anticorrupción del Gobierno chino «es muy popular» y «continuará».
El escándalo de los documentos de la firma panameña filtrados ha afectado a nueve líderes chinos, entre ellos el cuñado del presidente chino, Xi Jinping, el artífice de la masiva campaña anticorrupción y contra el dispendio lanzada hace tres años; y el nieto político del fundador de la República Popular, Mao Zedong.
Por otra parte, en El Salvador, la oficina local del bufete panameño Mossack Fonseca fue allanada por orden de la Fiscalía General después de que unos 33 salvadoreños con unos 220 negocios en su haber fueran vinculados con delitos de evasión fiscal y lavado de dinero relacionados con los servicios de esa firma.
Poco a poco aparecen también nuevas revelaciones sobre los 11,5 millones de documentos de Mossack Fonseca y el semanario italiano «l’Espresso» reveló hoy que el exprimer ministro de Italia Silvio Berlusconi compró derechos de películas a una sociedad radicada en las islas Vírgenes Británicas que figura en esas filtraciones.
El mismo seminario reveló que Daniel Fonseca, exjugador uruguayo del Roma, el Juventus y el Nápoles, aparece también en los papeles, así como el diseñador de moda italiano Valentino y el actor y director Carlo Verdone.
Los medios españoles La Sexta y El Confidencial revelaron además que el expresidente del FC Barcelona Josep Lluís Núñez y su hijo Josep Lluís Núñez i Navarro, que también fue vicepresidente de la entidad azulgrana, están entre los presuntos implicados por haber abierto dos sociedades en las Islas Vírgenes en 1999.
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, opinó hoy en su cuenta de Twitter que debe difundirse «toda» la información dentro del caso de los papeles de Panamá, para conocer «quién es quién».
Correa reaccionaba así a las declaraciones del director de ICIJ, Gerard Ryle, quien dijo esta semana al portal estadounidense Wired que no planean publicar toda la base de datos que obtuvieron de su fuente anónima, porque no son «WikiLeaks» y están «tratando de demostrar que el periodismo se puede hacer de forma responsable».