Ahora de 30 años, Jamie Lynn asegura que su inspiración para compartir la historia son sus hijas de 13 y 3 años. “Era muy importante para mí honrar mi voz”, dijo al programa Good Morning America. “Tengo que hacerlo, ¿o cómo puedo esperar que mis hijas se hagan respetar a sí mismas”.
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La exactriz insistió en que ella adoraba a Britney cuando eran niñas, porque la mayor de las Spears era “como otra mamá”. Pero al pasar los años, en el libro aparecen las palabras ‘errático’, ‘paranoico’ y ‘vertiginoso’ para explicar el comportamiento de la cantante.
Y sobre el estado en que Britney se encuentra ahora, Jamie Lynn opina que “no debería hablar del estado mental de alguien más”.
