Lo importante es destacar «la voluntad que existe de parte de Gobiernos y de pueblos en fortalecer sus instituciones de justicia», aseguró Velasquez en declaraciones a los periodistas.
Aunque se trata de una institución distinta a la Cicig, la Maccih trabajará también en la lucha contra la impunidad en Honduras, una labor que habrá que observar antes de valorar su éxito, insistió Velásquez.
El presidente hondureño, Juan Orlando Hernández, anunció ayer que su país está listo para firmar este martes, 19 de enero, el convenio con la OEA (Organización de los Estados Americanos) e instalar así la Misión de Apoyo contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras.
La Maccih, que está previsto que inicie operaciones en febrero próximo, busca «mejorar la calidad de los servicios prestados por el sistema de justicia de Honduras en la prevención y lucha contra la corrupción y la impunidad en el país».
La misión es una iniciativa «sin precedentes para abatir la corrupción e impunidad en Honduras», indicó el secretario general de la OEA, Luis Almagro.
La Maccih trabajará con la sociedad civil en la construcción de un observatorio que evalúe el sistema de justicia de Honduras y ayudará a que el Gobierno de Honduras «dé acceso irrestricto a informes y documentos oficiales, en apoyo a investigaciones».
La OEA acompaña así el «diálogo sin condiciones» propuesto el pasado 23 de junio por el presidente hondureño para tratar el combate a la corrupción y la impunidad en su país, lo que desde mayo de 2015 viene exigiendo un movimiento denominado «Oposición Indignada».
La Maccih, propuesta por la OEA, es resultado de la petición del Gobierno hondureño en junio para su iniciativa del Sistema Integral de Combate Contra la Impunidad y la Corrupción (Siccic), que incluye un diálogo nacional con los actores sociales y políticos.