La comisión parlamentaria que analiza si existen méritos jurídicos para iniciar un juicio político contra la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, comenzó hoy una sesión que acabará con una votación crucial para el futuro del proceso.

La comisión, integrada por 65 diputados, deberá votar el informe presentado por el diputado instructor, Jovair Arantes, quien ha recomendado que se avance hacia un juicio contra la presidenta por unas maniobras fiscales consideradas ilegales, pese a la opinión contraria del Gobierno, que califica el proceso de «golpe».

«Este no es el momento de dividir aún más al país», manifestó el presidente de la comisión, Rogério Rosso, quien instó a todos los diputados a seguir «rigurosamente» lo establecido en la Constitución y lo que dicten sus «conciencias».