El negro siempre “chic” y los metalizados superglamurosos se impusieron como tendencia de la gala.

Créditos: Twitter WB

Las actrices Margot Robbie y Vanessa Hudgens eligieron el negro para desfilar por la alfombra roja de los premios Oscar 2024, la noche del domingo 10 de marzo, en la ceremonia que premió a Oppenheimmer como mejor película.

El negro siempre “chic” y los metalizados superglamurosos se impusieron como tendencia de la gala.

La intérprete alemana Sandra Hueller, nominada a la mejor actriz por Anatomía de una caída y protagonista de Zona de interés, fue preparada para los primeros planos en los Óscar: llevaba un impresionante vestido negro de Schiaparelli con amplio escote escultural.

La legendaria artista puertorriqueña Rita Moreno, entre la élite de Hollywood con un EGOT (Emmy, Grammy, Oscar, Tony), llegó con un vestido negro con volantes en cuello y pecho.

Pero quien se robó las cámaras fue definitivamente Hudgens, protagonista de “High School Musical”, quien con un vestido negro de manga larga y corte ajustado, mostró su emoción por su embarazo con el jugador de béisbol Cole Tucker.

Brillos metálicos

Una de las mejores maneras de llamar la atención en la alfombra roja de los Óscar siempre es vestirse como la estatuilla dorada: los tonos metálicos son una apuesta segura y, sobre todo, atemporal.

Anya Taylor-Joy, presentadora de uno de los premios, deslumbró con un vestido plateado sin tirantes de Dior con muchas lentejuelas y destellos.

America Ferrera, quien estaba nominada a mejor actriz de reparto por su papel en “Barbie”, combinó dos tendencias de moda en la alfombra roja con un atuendo Versace sin mangas: metalizado y rosa.

Sirenas

Al igual que Bella Baxter, el personaje que interpreta en “Pobres criaturas”, la nominada a mejor actriz Emma Stone decidió marcar su propio estilo, con un conjunto de Louis Vuitton aguamarina pálido, sin tirantes, con un amplio peplum y una falda larga.

Hailee Steinfeld también se apuntó a la moda de las sirenas, con un vestido de gasa de Elie Saab con un corpiño dorado y un pañuelo atado a las muñecas a modo de mangas flotantes.

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