Al menos 55.219 personas fallecieron en Siria en el año 2015, de las cuales cerca de la mitad son civiles, según el último recuento que publicó hoy el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.

La ONG, que dispone de una amplia red de activistas en Siria, documentó la muerte de 20.977 civiles, entre los que hay 2.574 niños y 1.944 mujeres.

Por otra parte, fallecieron 7.728 combatientes rebeldes sirios, pertenecientes tanto a las facciones moderadas como a las islamistas.

Mientras, el Ejército sirio perdió a 8.819 de sus hombres en los pasados doce meses, según el Observatorio.

Asimismo, murieron 7.275 milicianos sirios que luchan en el bando gubernamental, además de 1.214 combatientes extranjeros que apoyan a Damasco y 378 miembros del grupo chií libanés Hizbulá.

Por otro lado, perecieron al menos 16.212 miembros extranjeros de grupos yihadistas, principalmente de la organización Estado islámico y del Frente al Nusra (filial siria de Al Qaeda) de distintas nacionalidades.

El Observatorio subrayó que en este recuento no se incluyen los miles de desaparecidos ni los miles de prisioneros en manos de las fuerzas del régimen del presidente Bachar al Asad y de los grupos rebeldes armados u organizaciones yihadistas en Siria.

En 2014, al menos 76.021 personas perdieron la vida en la guerra siria, de las que 17.790 eran civiles.

Desde el inicio de la contienda en marzo de 2011, han muerto más de 260.000 personas, según el Observatorio.