Al menos 39 combatientes del grupo yihadista Estado Islámico (EI) murieron en choques con las tropas iraquíes en varias zonas de la provincia de Al Anbar, en el oeste de Irak, informó a Efe una fuente local de seguridad.

La fuente explicó que el Ejército y fuerzas especiales anti terrorismo entraron este jueves a la población de Al Siyariya, al este de Ramadi, capital provincial de Al Anbar, después de duros choques con los radicales.

Al menos 20 extremistas perecieron en esos enfrentamientos, mientras que las fuerzas gubernamentales recuperaron armas y equipos militares que estaban en manos de los miembros del EI.

Durante los combates, la aviación de la coalición internacional encabezada por EE.UU, y los cazas iraquíes apoyaron a las fuerzas terrestres, que aún así no pudieron avanzar rápidamente a causa de las minas antipersona y artefactos explosivos plantados en las carreteras por los extremistas.

Por otra parte, el Ejército iraquí arrebató hoy al EI la zona de Busadra, a 18 kilómetros al norte de Faluya, también en la provincia de Al Anbar, después de duros enfrentamientos que causaron 19 muertos en las filas de los yihadistas.

La fuente de seguridad añadió que durante esos choques las fuerzas de seguridad destruyeron cuatro coches bomba conducidos por hombres suicidas.

Asimismo, la Comandancia de Operaciones de Bagdad anunció que sus fuerzas tomaron el control de la zona de Albushayal, en el oeste de la población de Al Saqlauiya, a 55 kilómetros al oeste de la capital.

El grupo terrorista EI irrumpió en Irak y declaró un califato en los territorios que conquistó en este país en la vecina Siria en junio de 2014.

Actualmente controla zonas de Al Anbar y su capital, Ramadi, fue recuperada por las fuerzas gubernamentales tan solo el pasado diciembre, después de más de seis meses de control yihadista.