Juan Baquerizo, representante de los empresarios de La Mariscal, en entrevista en Notimundo a la Carta con Marcela Holguín, manifestó que les llamó la atención, en primera instancia, el anuncio realizado por los Ministerios de Turismo y Del Interior de ampliar los horarios de atención de los establecimientos de entretenimiento.

Juan Baquerizo, representante de los empresarios de La Mariscal, en entrevista en Notimundo a la Carta con Marcela Holguín, manifestó que les llamó la atención, en primera instancia, el anuncio realizado por los Ministerios de Turismo y Del Interior de ampliar los horarios de atención de los establecimientos de entretenimiento, y mucho más, que tres días después de confirmada la misma se la suspenda. Sin embargo, afirmó que más allá de estas resoluciones parches, lo que preocupa a los empresarios es que un tema delicado que sigue estando en «pensamientos de escritorio». «No sabemos si en el proyecto de país, el turismo está enfocando a un turismo de fiesta y se deja de lado el de aventura o de bellezas naturales», afirmó.

Baquerizo manifestó que desde las autoridades no se han implementado medidas estructurales al consumo de alcohol, y desde la organización empresarial han pedido la implementación de una Ley que controles las bocas de expendio. «No todos los locales están en condiciones de expender licor con los suficientes niveles de seguridad», afirmó el empresario, quien añadió que este no es un tema de horarios, porque, a su criterio, se debería vender este tipo de bebidas las 24 horas del día. «Es un tema de que no existe una Ley, entonces cualquiera puede vender sin tener las condiciones», reiteró.

Asimismo, detalló que en La Mariscal, centro norte de Quito, en la actualidad existen 1 032 sitios que expenden bebidas alcohólicas. Sin embargo, de acuerdo a normas internacionales, que fueron implementadas en la mayoría de países de Latinoamérica, debería existir no más de 230 sitios. «Esto, basado en el número de habitantes permanentes y flotantes», enfatizó. Además, recalcó que los controles deben ser realizados por los Gobiernos Autónomos Descentralizados y en el caso de La Mariscal, que es una zona de interés turístico, lo debe hacer Quito Turismo y la Agencia Metropolitana de Control.