El artista estuvo poco más de dos horas sobre el escenario montado en el Estadio Nacional Julio Martínez, deleitando a sus fanáticos con sus éxitos.
Sin embargo, previo al inicio del espectáculo se registraron diversos hechos de violencia en los accesos al recinto deportivo, donde grandes grupos de personas provocaron desórdenes y lograron entrar al concierto sin entrada.
Asimismo, dentro del recinto algunos asistentes saltaron las rejas y pasaron de un sector a otro.
En conversación con Teletrece, el subsecretario de Prevención del Delito, Eduardo Vergara, indicó que los organizadores del evento -la productora Bizarro Live Entertainment- deberán hacerse cargo de lo sucedido e incluso no descartó la suspensión de los otros dos conciertos programados para hoy miércoles y mañana jueves.
Una vez finalizado el esperado concierto, Bizarro respondió al subsecretario Vergara, asegurando que «el espectáculo se llevó a cabo bajo un estricto protocolo de seguridad y logística».
«Duplicamos recursos humanos, técnicos y de planificación coordinada para hacer frente a la ola de violencia y delincuencia que han vivido últimamente los eventos masivos en nuestro país, incluso con la aparición de bandas organizadas que se dedican a la falsificación de entradas y coordinación de avalanchas en puertas, los que se han hecho constantes sin tener adecuada atención de las autoridades», señaló la empresa en un comunicado publicado en sus redes sociales.