Después de que Rihanna tuviera el bonito detalle de enviarle a Jennifer López un par de las botas que ha diseñado para Manolo Blahnik -valoradas en 4.350 dólares- esta quiso devolverle el favor luciéndolas en el videoclip de su canción Ain’t Your Mama.

Sin embargo, más adelante acabaría arrepintiéndose de haber tomado esa decisión, ya que los zapatos de Rihanna demostraron ser los más incómodos que se había puesto nunca a la hora de bailar.
“Rihanna me envió unas botas maravillosas y pensé: ‘¡Estas tienen que salir en el vídeo! Pero, ¿cómo voy a incluirlas?’.
Resultó muy difícil bailar con ellas puestas.
Yo era la única que llevaba tacones y estábamos bailando en la calle, sobre el asfalto.
No son las mejores botas del mundo para bailar, pero nos las arreglamos”, confesó la diva del Bronx en un cuestionario con sus fans en Facebook.