Río se prepara para recibir entre 500.000 y 700.000 extranjeros para los Juegos del próximo agosto, evento cuyas medidas de seguridad "ya están listas" e incluyen un Centro de Cooperación Policial Internacional (CCPI) y un Centro Integrado Antiterrorismo, en el que colaborarán policías de otros países.

Así lo explicó este lunes en Madrid el secretario extraordinario de Seguridad para Grandes Eventos de Brasil, Andrei Passos Rodrigues, quien recordó que Río 2016 contará con un operativo de 47.000 personas para velar por que todo salga bien y «otros 20.000 de fuerzas armadas que tendrán un papel importante para los Juegos»

«En Brasil habrá un Centro de Cooperación Policial Internacional (CCPI). Para el Mundial de Fútbol 2014 recibimos policías de 40 países y ahora hemos invitado a 55 países a cooperar con nosotros. Además hicimos el Centro Integrado Antiterrorismo y vamos a invitar policías extranjeros y creamos un programa de observación por el que enviamos casi cien policías brasileños a los eventos más importantes del mundo deportivos o no», explicó a EFE.

Passos recordó que Brasil ha destinado un presupuesto total de 500 millones de dólares para la seguridad de sus grandes eventos y que, a diferencia de Londres 2012, Río no tendrá seguridad privada, sino que incluso en el interior de las instalaciones la seguridad la llevará a cabo la Fuerza Nacional de Policía.

«Hace un par de semanas entregamos al COI y al Comité de Brasil los detalles de los 45 planes operativos después de hacer pruebas test en todas las instalaciones. No son papeles en el cajón. Por el tema de seguridad el comité organizador de Brasil nos ha dicho que ya está listo y puede empezar hoy los Juegos. Río está listo por la seguridad y a punto de estar por las obras», aseguró.

El responsable de seguridad de los próximos Juegos admitió que después de los últimos atentados cometidos por el Estado Islámico en París y Bélgica sí ha percibido preocupación sobre este aspecto entre los países participantes, «hasta que la gente sabe que lo que Brasil está haciendo». «Nadie puede estar indiferente a barbaries como éstas», dijo a EFE.

Cuestionado por los posibles problemas de tráfico que pueden generarse en Río durante la celebración de los Juegos, Andrei Passos comentó que los planes de tráfico y seguridad se crearon de forma conjunta y aseguró que la familia olímpica tendrá carriles específicos para sus traslados.

«Hay carriles exclusivos para los competidores y algunos de la familia olímpica con coches acreditados para este carril. También hay carriles compartidos con transporte público y algunos coches con acreditación, además de carriles comunes. Río ha invertido muchísimo en tema de movilidad con el metro», señaló.

Passos comentó que «está por concluir el último tramo de la línea 4 de metro, que va hasta el parque olímpico en Barra, y desde allí habrá autobuses para los traslados a otras zonas de competición».

«Habrá tráfico pero los carriles para los atletas y la familia estarán y los demás tendrán una mejora para los desplazamientos», afirmó tras precisar que durante los Juegos habrá vacaciones escolares, igual que en otros colectivos.

El directivo brasileño, que mañana tiene previsto viajar a Atenas para participar en la ceremonia de entrega de la antorcha olímpica y su traslado, aclaró que Río espera también una gran llegada de periodistas para los Juegos, 30.000 con acreditación y unos 15.000 sin ella, y que se ha dispensado de la exigencia de visado a países como Japón, Estados Unidos, Canadá y Australia.

«El tema político no tendrá ninguna influencia. Me encantaría que nadie supiera que yo existo, porque eso supondría que todo ha salido bien. Mi sueño es que a finales de los Juegos Paralímpicos todos tengan la imagen de que Brasil es un país capaz de organizar eventos con seguridad y que todos hayan participado de un evento de mucha celebración», concluyó.