La secretaría de Justicia y Ciudadanía de Ceará contabilizó hoy cuatro fallecidos más, con respecto a los catorce de los que se había informado el lunes, aunque precisó que todas las muertes se produjeron en enfrentamientos de presos ocurridos entre el sábado y el domingo.
El lunes se registró una nueva rebelión en la cárcel Agente Luciano Andrade Lima, pero la policía y los agentes penitenciarios lograron contener la revuelta sin que se registrasen heridos, según un comunicado de la secretaría.
De los 18 fallecidos, diez aún no han sido identificados porque los cadáveres estaban carbonizados, por lo que será necesario realizar análisis de ADN.
Para evitar nuevos conflictos, se transfirió varios internos que habían sufrido amenazas a una nueva cárcel que está en fase final de construcción, el complejo Itaitinga II.
Los motines comenzaron el sábado coincidiendo con la huelga de 24 horas que realizaron ese día los agentes penitenciarios de Ceará, y en la mayoría de los casos fueron controlados el domingo.
En la cárcel Agente Luciano Andrade Lima, donde se repitieron los conflictos el lunes, la Policía halló un túnel excavado por los presidiarios, aunque no se han notificados fugas de reclusos.
