Toledo aseguró en una entrevista publicada hoy en el diario La República que ya tomó la decisión y «esta será la última vez» que lidere una candidatura para los comicios presidenciales.
«Me dedicaré a formar a los nuevos líderes del partido (Perú Posible), para que esos nuevos cuadros que salgan sean los que asuman los retos distintos que vienen para el país», anunció.
Toledo indicó que se sigue considerando como un actor «absolutamente vigente» de la política peruana, pero lamentó que los adolescentes no conozcan el liderazgo que tuvo en las manifestaciones del año 2000 para impedir la reelección de Alberto Fujimori (1990-2000).
El expresidente peruano se mostró a favor de la unión civil entre homosexuales para que puedan compartir bienes, pero se opuso a la adopción en parejas del mismo sexo al considerar que vulneraría el «derecho humano fundamental» de los niños, «quienes no podrán diferenciar entre padre y madre».
Cuestionado por la investigación que se le sigue por un presunto delito de lavado de activos, Toledo exigió que «muestren de una vez» si es que hay alguna evidencia de que él o su esposa, Eliane Karp, han comprado algún inmueble o tienen cuentas en Costa Rica.
Toledo y su esposa son investigados desde 2013 por la Fiscalía por las millonarias compras inmobiliarias hechas por Eva Fernenbug, suegra del exmandatario, con dinero de la empresa Ecoteva, formada en Costa Rica por ella y el empresario Josef Maimam, cercano al político.
La intención de voto de Toledo está en el 3 %, por detrás de Keiko Fujimori, hija de Alberto Fujimori, con un 33 %; del exministro de Economía Pedro Pablo Kuczysnki y del empresario César Acuña, ambos con 13 %; del expresidente Alan García (1985-1990 y 2006-2011), con 8 %; y del tecnócrata Julio Guzmán, con 5 %, según los últimos sondeos.
La primera vuelta de las elecciones peruanas se celebrará el domingo 10 de abril y los dos candidatos más votados pasarán a una segunda rueda para junio si ninguno alcanza la mitad más uno de los votos.