La Secretaría General de la Unasur, con sede en Quito, señaló en un comunicado que el encuentro presidencial podría servir para expresar la solidaridad con las víctimas del terremoto que el pasado sábado asoló el norte de la costa ecuatoriana.
La presidencia de turno de la Unión, que la ostenta Uruguay, convocó a la cita, en la que también traspasará el mando temporal del grupo a Venezuela.
El canciller uruguayo, Rodolfo Nin Novoa, exhortó a los integrantes de Unasur a estar presentes en Ecuador «en este momento tan doloroso que vive el país» y ratificó que se trata de una Cumbre de Solidaridad con las víctimas del terremoto.
De su lado, el secretario general de Unasur, el expresidente colombiano Ernesto Samper, coincidió y extendió el sentimiento de solidaridad a las víctimas de Uruguay, azotado la semana pasada por un tornado, y de Chile, también afectada por un intenso temporal que durante los últimos días azotó el centro y sur del país.
El canciller ecuatoriano, Guillaume Long, esta misma mañana ratificó que, pese al terremoto, el próximo sábado se realizará en Quito la Cumbre de Unasur, como estaba previsto.
El bloque suramericano está integrado por Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, Guyana, Paraguay, Perú, Surinam, Uruguay y Venezuela.
