El alcalde lojano Bolívar “Chato” Castillo enfrenta este domingo, en las urnas, un proceso de revocatoria de su mandato. Esto se evidencia en los exteriores del Municipio con manifestaciones a favor y en contra de su gestión.
Castillo necesita la mitad más uno de los votos para continuar en el cargo, caso contrario, y como él indicó, el lunes dejará el despacho a la vicealcaldesa, Piedad Pineda. “No les tengo miedo, ¡quién ha dicho que les tengo miedo!”, dijo este martes 19 de junio el Alcalde en su oficina mientras en las afueras de la Municipalidad los gritos de apoyo se mezclaban con los que exigen su salida.
Castillo cree que en este proceso solicitado por Segundo César Armijos, presidente de la Unión Provincial de Cooperativas de Taxi de Loja, hay intereses políticos para las próximas elecciones.
Para el alcalde de Loja, Bolívar Castillo, el pedido de revocatoria a sus funciones no es más que un asunto político de quienes, a su criterio, “buscan figurar en las próximas elecciones”.
Él cree que existe manipulación política y no se ve todo el trabajo que se ha hecho en la ciudad, por ejemplo, la regeneración urbana que finalizará en julio próximo.
