La intervención se ejecutó con orden judicial y gracias al apoyo del Grupo de Operaciones Especiales (GOE) y de Servicio Urbano, que contabilizaron 2.024 pacas y 700 cartones de vestimenta nueva y usada, que se presume provendrían de Estados Unidos y se tenía previsto comercializar en la Bahía y centros comerciales de Guayaquil.
El oficial encubierto de la DGI a cargo del operativo explicó además que la mercadería posiblemente llegó por vía marítima o aérea y que al no ser declarada legalmente trasgredió las normas del Servicio Nacional de Aduana, causando un perjudicio al Estado, cuyo monto está por determinarse.
“La bodega fue alquilada en noviembre del año pasado, a un valor de 900 dólares mensuales, ahora estamos en la etapa de vinculación de responsables, siendo la persona que aparece en el contrato de arrendamiento el primero al que se emitirá boleta de detención”, agregó el policía de la DGI.
La mercadería decomisada fue trasladada hasta las instalaciones del Servicio Nacional de Aduanas donde se determinará su destino luego de que el proceso legal culmine.