Este nuevo curso formativo contó con la presencia de Diego Fuentes, ministro del Interior (e); Isolde Morales, presidenta de la Comisión de Reclutamiento; el general Milton Zárate, comandante General de Policía (e), oficiales superiores, y familiares de los nuevos cadetes.

Alrededor de 361 hombres y 61 mujeres provenientes de todo el país, luego de aprobar y obtener las mejores calificaciones en las pruebas del Examen Nacional de Educación Superior (ENES) y de ingreso a la entidad policial, ingresaron a la Escuela Superior de Policía Gral. Alberto Enríquez Gallo, ubicado en Pusuquí, al norte de Quito, para iniciar el proceso de formación de los nuevos cadetes y convertirse en los futuros oficiales y líderes de la institución al beneficio de la ciudadanía.

Dentro del protocolo, las autoridades recibieron el saludo y recibimiento del Alto Mando policial. Los cadetes formados en el campo de ceremonias entonaban el Himno Nacional, acompañados de sus familiares que los veían desde los graderíos con varias maletas y chaquetas en mano, quienes sentían la angustia de sus hijos en el momento más importante de su vida, pues inician no solo una carrera profesional, sino una vida de servicio comunitario y de protección a la ciudadanía.

Diego Fuentes, durante su discurso pronunciado al auditorio, destacó que el país vive un verdadero proceso democrático de cambio, y la Policía Nacional no es la excepción, al ser la Seguridad Ciudadana uno de sus pilares fundamentales. Agregó que bajo el liderazgo del presidente Rafael Correa y ministro José Serrano, se ha emprendido un trabajo cuya finalidad ha sido consolidar la seguridad, y a través de ella, el desarrollo del país.

Recalcó que esta Cartera de Estado, junto a la Institución policial han logrado significativas reducciones en la tasa de homicidios y asesinatos, con una tasa de 6,4 casos por cada 100 mil habitantes en el año 2015. En el año 2009, esta tasa llegó a oscilar en 19 casos por 100 mil habitantes. Hoy gracias al permanente trabajo preventivo y de gestión se mantiene en una de las más bajas de la región.

 

Luego de tres décadas se logró una tasa de un solo dígito en este indicador. Gracias a la confianza ciudadana agregó que “la Policía Nacional es una institución de cambios profundos y permanentes, que se redefine e institucionaliza cada día para garantizar sus derechos y libertades”.

Por otra parte, indicó que se ha logrado reducir sustancialmente las cifras de siete principales delitos a nivel nacional en un 15 % respecto al 2015 y que Ecuador se coloca en el tercer país más seguro de la región y a las ciudades de Quito, Ambato y Cuenca, entre las 10 más seguras de Latinoamérica.

A los 421 cadetes les comprometió a prepararse con rigurosidad en esta Escuela de Formación para entregar todo por la Patria y sus ciudadanos. Por último, ratificó el compromiso del Ministerio del Interior por seguir trabajando en la transformación del país, para que ofrezca mejores condiciones de vida a la sociedad.

De su parte, el general Zárate sostuvo que en esta alma máter se forjan los caballeros de la paz y los líderes del cumplimiento institucional en brindar Seguridad Ciudadana a nuestra comunidad. Destacó la vocación de los jóvenes que luego de arduas pruebas académicas fueron seleccionados para ser parte del servicio, no solo policial sino comunitario.

Comprometió a los futuros líderes a formarse y practicar los valores de la doctrina policial como la vocación del servicio público, patriotismo, honor, integridad, espíritu de justicia, solidaridad, disciplina, responsabilidad, perseverancia, lealtad, honradez, valentía, credibilidad, austeridad, tolerancia y prudencia, en toda su instrucción y servicio ciudadano.

El evento culminó con una emotiva despedida familiar donde padres, madres, y hermanos, con lágrimas en los ojos, cariñosos, besos, fuertes abrazos, desearon éxitos en su formación para servir con excelencia a la sociedad.