De acuerdo con el Ministerio de Salud (Minsa), en ese período, se registraron 7.569 casos de neumonía en menores de cinco años, con 48 fallecimientos. La mayor cantidad de muertes se presentó en los departamentos de Cusco, Junín, Huancavelica, Ayacucho y Puno, en el centro y sur andino del país.
En estas regiones, con territorios ubicados por encima de los 4.000 metros, la temperatura llega a 18 grados bajo cero en invierno, con hielo depositado en las superficies.
Algunos sectores altoandinos y de la selva del Perú, con población mayoritariamente pobre, afrontarán hasta agosto fuertes olas de frío que golpean tanto a ciudadanos como a sus actividades productivas, obligando al gobierno a desarrollar planes de protección.
Para contrarrestar estos daños, el Minsa ha enviado módulos de atención a 14 regiones afectadas por heladas y friajes (fuertes vientos en zonas de selva), para apoyar la labor de los centros de salud. Además, se han distribuido más de un millón de vacunas contra la influenza y la neumonía.
Según la última evaluación de daños del Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci), 311.655 personas de 14 regiones han tenido problemas de salud debido a las bajas temperaturas.
En mayo, el gobierno peruano declaró en emergencia, por un plazo de 60 días, a catorce regiones del país debido al brusco descenso de temperaturas, al friaje y a las heladas en los Andes.