Los excomandantes de las Fuerzas Armadas son procesados a raíz de un bombardeo no autorizado por Quito contra una base guerrillera, que dejó una veintena de muertos, entre ellos un ecuatoriano, según una resolución conocida el jueves.
Si «no se presenten voluntariamente» se debe proceder a la «ubicación, localización y captura de los procesados para que se realice la audiencia de juzgamiento», señaló la corte en su escrito.
La justicia tomó la decisión tras rechazar una apelación presentada por la defensa del vicepresidente colombiano Óscar Naranjo, que era jefe de la Policía en la época de ese ataque contra las ya disueltas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
En el ataque murió Raúl Reyes, segundo al mando de las FARC, grupo que firmó la paz en 2016 antes de convertirse en partido político. En el proceso penal abierto en 2011 por la Fiscalía de Ecuador, también están llamados a declarar los exjefes de las Fuerzas Militares, Freddy Padilla; del Ejército, Mario Montoya; de la Marina, Guillermo Barrera; y de la Fuerza Aérea, Jorge Ballesteros, además del entonces coronel Camilo Álvarez.
Padilla forma parte del equipo del presidente Juan Manuel Santos que sostiene diálogos de paz con la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) en Quito. Bogotá ha desconocido la competencia de la justicia ecuatoriana en este caso.
De acuerdo a la resolución judicial, dictada el 16 de marzo pasado, el proceso «continúa en firme», dijo Luis Ángel Saavedra, director de la Fundación Regional de Asesoría en Derechos Humanos (Inredh) de Ecuador.
Fuente: El Telégrafo