En el marco del Día Mundial contra el Cáncer, que se conmemora este 4 de febrero, Ernesto Sánchez Forgach, fundador de la Asociación Mexicana de Mastología, explicó que el envejecimiento es uno de los factores por los cuales la gente enferma más de cáncer.
«Por ejemplo, se sabe que una de cada cuatro mujeres mayores de 80 años puede tener cáncer de mama, mientras que el 90 % de los hombres mayores de 80 años tiene algún tipo de cáncer de próstata«, aseveró el oncólogo.
Esto, aunado a los estilos de vida, está incidiendo para que en la actualidad el cáncer sea una de las primeras causas de muerte a nivel mundial, mientras que en México es la tercera causa.
Explicó que actualmente 18 millones de personas al año son diagnosticadas con cáncer, de las cuales, 9,6 millones mueren «es decir diariamente 26.000 pacientes pierden la vida a causa de esta enfermedad«, dijo.
Aseguró que, de seguir la tendencia en 2040 este padecimiento será la primera causa de defunción a nivel mundial pues se pronostica que para ese año se diagnostiquen unos 30 millones de casos.
Sánchez Forgach detalló que las causas que producen el cáncer son diversas y pueden ser genéticas, físicas, químicas y biológicas.
«Heredamos ciertos genes que nos dan cierta predisposición a padecer cáncer, pero también agentes como el tabaco o el alcohol o virus como el Papiloma Humano o la hepatitis, son causas de cáncer«, señaló.
Sin embargo, el especialista en cáncer de mama destacó que actualmente el sobrepeso y la obesidad también son desencadenantes del cáncer «e incluso, han sobrepasado al tabaquismo como factor de riesgo», la buena noticia es que el abordaje para tratar el cáncer «ha evolucionado«.
«Hoy, por ejemplo, tenemos el conocimiento de la biología de los tumores, de su genética y su genómica con lo que podemos mejorar los tratamientos y hacerlos más personalizados», aseveró.
En ese sentido se expresó Horacio Astudillo, médico doctorado en biomedicina molecular, quien aseguró que una de las alternativas más eficaces para el cáncer de mama, pulmón o colon son las terapias blanco o dirigidas.
Estas terapias actúan en blancos moleculares específicos que están asociados con el cáncer, a diferencia de las quimioterapias que actúan en todas las células que se dividen con rapidez, ya sean normales o cancerosas.
«Son terapias que funcionan en pacientes que incluso tienen la enfermedad en etapa metastásica«, asegura el experto.
Para ello, ha sido necesario el estudio científico de los biomarcadores moleculares.
«Estos biomarcadores pueden ser genéticos o proteicos, cuya presencia, ausencia o el grado de expresión de alguno de estos puede tener relevancia e impacto, no solo en el pronóstico de la enfermedad sino en la decisión terapéutica del paciente«, indicó.
Explicó que los biomarcadores moleculares sirven para evaluar más de 400 genes del cáncer donde se pueden buscar casi 16.000 mutaciones o alteraciones genéticas en todo el tumor.
Este tipo de estudios han llevado a que muchos pacientes logren la remisión de la enfermedad y en algunos casos la cura, además de la que supervivencia para otros rebasa ya los cinco años.
Sin embargo, aunque esta terapias ya están disponibles en prácticamente todo el mundo, aún sigue habiendo un rezago en el acceso a tratamiento en regiones como América Latina.
«Es por ello que necesitamos generar consciencia en los Gobiernos y la población, mejorar las políticas de salud pero se necesitan recursos y mucho trabajo para conseguir esto», sostuvo Sánchez Forgach.
Fuente: EFE, aliado estratégico de FM Mundo