A decir del legislador Juan Carlos Casinelli, en la agenda está previsto revisar la formulación de un segundo paquete de enmiendas que deben «nacer de un conversatorio previo con la ciudadanía», y no como ocurrió con el primer paquete, aprobado en diciembre del año anterior, que se envió desde el Ejecutivo.
Indicó que producto de la socialización del primer paquete de enmiendas hubo «inquietudes de la ciudadanía sobre otros temas». Por ello, desde la Asamblea se planteará un cronograma de tres meses en los que se realizará trabajo en territorio y después se presentará un paquete de enmiendas a la Corte Constitucional.
Entre los temas prioritarios para la construcción del segundo paquete de enmiendas se encuentran los que tienen que ver con la doble nacionalidad para los migrantes, el manejo de conocimientos ancestrales, las funciones de la Defensoría del Pueblo, entre otros.
«Hay temas generales, por ello nuestra apuesta es la revisión del texto constitucional y de los temas generales también», precisó la legisladora oficialista Alexandra Ocles, quien indicó que el proceso de diálogo con la ciudadanía se busca reflexionar, primero, sobre “si hay temas que deben ser enmendados» y, luego, la pertinencia de cada uno de ellos.
Para el asambleísta Diego Vintimilla, el objetivo fundamental del segundo paquete es «conversar y consultar con la ciudadanía cuáles son las necesidades y los temas a modificar en la modalidad de enmienda constitucional.
Los legisladores oficialistas plantean el diálogo como una forma de construir nuevas enmiendas y el proceso que debe realizarse para que participen todos los ciudadanos en un proceso que apenas inicia.
El movimiento oficialista también tiene el reto de revisar los logros que se ha obtenido a lo largo de nueve años de Gobierno, sostuvo el asambleísta del bloque de gobierno, Virgilio Hernández.