En la ceremonia de apertura del foro en Cancún, en el Caribe mexicano, el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio, destacó la importancia de abordar esta discusión con «rigor» y en un «clima constructivo», a fin de hallar «la mejor ruta a seguir» ante el problema de las drogas, que afecta a millones de mexicanos.
Para ser eficaces, las políticas públicas deben estar sustentadas en «diagnósticos claros e informados», apuntó tras destacar que el debate será «transparente», «plural» y «especializado», ya que contará con la participación de numerosos expertos nacionales y extranjeros.
El presidente Enrique Peña Nieto convocó al debate después de que la Suprema Corte de Justicia declaró inconstitucional en noviembre pasado la prohibición absoluta del consumo personal de la hierba en la legislación y autorizó a cuatro querellantes usarla con fines recreativos.
Sobre el uso medicinal, Osorio aludió a la opinión mayoritaria a nivel internacional sobre sus beneficios y dejó en claro que el Gobierno está a favor «de analizar con total apertura alternativas que contribuyan a mejorar la calidad de vida (…) de quienes sufren alguna enfermedad».
El foro de este martes analizará las alternativas regulatorias de la marihuana bajo una perspectiva de salud pública y prevención de adicciones.
En cinco mesas se abordarán los efectos de la marihuana en la salud, los mecanismos para prevenir y tratar el consumo, los usos terapéuticos, los niveles de adicción que genera entre los usuarios, así como los casos de éxito y fracaso en la reducción del consumo en otros países.
El titular de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios, Mikel Arriola, detalló que para este foro se registraron 64 posturas diferentes y 43 ponentes.