Su familia publicó un comunicado rindiendo homenaje a su ‘legado duradero y espíritu magnético’. El análisis forense, realizado al día siguiente de que se encontrara el cuerpo de la actriz de 33 años en un lago del sur de California, no encontró indicios de lesiones traumáticas ni enfermedades que pudieran haber contribuido al ahogamiento, y no halló indicios preliminares de que drogas o alcohol pudieran jugar un papel en su muerte, según un comunicado del forense del condado de Ventura.
Se utilizaron registros dentales para confirmar la identidad de Rivera y se harán pruebas toxicológicas rutinarias de drogas y alcohol, según el comunicado.