Así lo aseguró hoy el secretario de la Unasur, el colombiano Ernesto Samper, durante la sesión ordinaria de cancilleres, que se desarrolla en la sede del grupo, en el norte de Quito.
«Vamos a llevar una posición unificada a la Asamblea de Drogas de Naciones Unidas», dijo Samper al reiterar que será «la única región que va a llegar con una decisión de consenso sobre el tema de las drogas».
En la reunión de cancilleres, cuya parte inicial transmitió en vivo el portal web de la Unasur, Samper explicó que la propuesta consiste en «colocar el tema de los derechos humanos por encima de la lucha contra las drogas».
«Ninguna actividad puede pasar por encima de los derechos humanos, por importante que ella sea», recalcó al apuntar que la propuesta de la Unasur es que se haga una reconsideración de la política de drogas.
Ello, «no para llegar a una política distinta» sino para tener en cuenta dos consideraciones «elementales»: reforzar la lucha contra el crimen organizado e incorporar el tema de los derechos humanos, comentó.
«Así como en este momento hemos sido débiles con los duros y duros con los débiles en la lucha contra las drogas (…), mientras tanto no hemos sido capaces de identificar procesos comunes en la lucha contra el crimen organizado, como el tema de lavado de activos; por lo menos cambiemos el chip», dijo.
Así, pidió encontrar «unas salidas a los sectores débiles» y reforzar «la actividad frente a los sectores del crimen organizado».
«Esta propuesta y la de que Naciones Unidas, de alguna manera, integre un panel para que se lleve este tema de derechos humanos como parte fundamental de discusión de drogas, será presentado por Unasur» a la Asamblea sobre drogas que tendrá lugar en abril, en Nueva York, subrayó.
La Unasur está formada por Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, Chile, Ecuador, Guyana, Paraguay, Perú, Surinam, Uruguay y Venezuela.