El fiscal Cássio Conserino citó a declarar a Lula y a su mujer Marisa Letizia Lula da Silva el próximo 17 de febrero en Sao Paulo para investigar si el expresidente es propietario de un apartamento que no fue declarado, lo que constituye un delito de blanqueo de dinero, confirmó a Efe el Ministerio Público.
Es la primera vez que el exmandatario es llamado a declarar como investigado, pues hasta ahora sólo había sido intimado en calidad de testigo.