Con la frase “Sembramos futuro” y en un video propagandístico de 56 segundos, el Gobierno destaca lo que considera los principales logros en su gestión.
“¡Sembramos futuro con obras! Aquellas que se realizaron mientras se recuperaba la libertad de expresión, se ordenaban las finanzas, se reconstruían las relaciones internacionales y se recuperaba el Ecuador. Sembramos prosperidad y cambio para todos”, esa es la idea central del producto audiovisual que se pasa en televisión, radio y redes sociales.
Allí, Moreno asegura que “decían que no había obras”, pero va a hablar de “los nuevos hospitales y centros de salud construidos, de los miles de kilómetros de nuevas carreteras, puentes y terminales, de las más de 160.000 casas, escuelas rurales, proyectos de agua potable y alcantarillado”.
“Hablemos de todas esas obras que hicimos mientras recuperábamos la libertad de expresión, mientras ordenábamos la economía, mientras reconstruíamos las relaciones internacionales, mientras arreglábamos aquello que se había dañado, por eso, hoy, te puedo decir que dejamos sembrado un futuro de paz, libertad y prosperidad”, sostiene el mandatario saliente.
Aún se desconoce el costo de la producción de este spot propagandístico de despedida del gobierno de Moreno. El portal de Compras Públicas aún no registra esta contratación.
Mientras, la Secretaría General de Comunicación de la Presidencia dispone reproducir el video a diario y en repetidas ocasiones en los medios de difusión oficiales y también en los medios de comunicación privados, como parte de los espacios que tiene el Gobierno por disposición legal; el presidente Moreno sube de tono en sus declaraciones.
No solo contra el gobierno de Rafael Correa, sino también contra el “pueblo”, contra una señora pasada de peso, contra Nicolás Maduro, contra Julián Assange y otros. Lo hace en eventos nacionales y también en eventos internacionales.
Un ejemplo dentro del país, en una visita a Nono (noroccidente de Quito), el mandatario contó, a modo de anécdota, que una mujer “bastante llenita de carnes” le había dicho que el pueblo padecía de hambre y él había respondido: “Usted no, señora. A usted se le ve bastante gordita”.
A nivel internacional, en el marco de un foro sobre democracia realizado en Estados Unidos, esta última semana, Moreno, entre otras cosas, reveló que estuvo a punto de renunciar al ver la emboscada que le habían dejado para gobernar, en lugar de la “mesa servida”.
También, al referirse a la corrupción, contó otra anécdota, que un señor le había dicho que ojalá tuvieran un mejor presidente y que él había respondido: “Ojalá tuviera un mejor pueblo”.
En ese mismo escenario, arremetió contra Nicolás Maduro pidiendo que “saque sus sangrientas manos” de Colombia, por el conflicto social que está atravesando en estos días.
Respecto a estos dos aspectos, la propaganda sobre las obras y el discurso presidencial, Pedro Donoso, director general del gabinete estratégico Icare, considera que el mandatario está muy interesado en establecer una estrategia de mejoramiento de su imagen y credibilidad desde la lógica del marketing político que finalmente no cumple con su objetivo.
“Mientras sucede esto, los hechos en Ecuador son otros, la desorganización en las vacunas… es sumamente importante que el discurso tenga sindéresis con las acciones, porque si el discurso va por el lado de intentar desmitificar que ha sido un mal gobierno o intentar revertir las malas cifras de credibilidad, no puede ser que tu discurso sea uno, pero las acciones sean otras, tiene que haber una lógica de discurso y acción”, expresó.
Donoso agrega que si hay una publicidad sobre las obras, sería importante que se detallen lugares y costos de estas.
Nota Original: El Universo – LINK