Pese a que Santiago Cuesta Caputi, exconsejero del presidente Lenín Moreno, ha señalado mediante comunicados, desde España, que no conoce nada y nada tiene que ver con los hechos investigados en el caso Las Torres, mañana el exfuncionario público tendrá la oportunidad de en versión decir lo que conoce sobre el caso por delincuencia organizada y quizá dar el por qué se lo ha nombrado en conversaciones y versiones que son parte del expediente.
En transcripciones hechas de conversaciones mantenidas entre el accionista de la empresa Nolimit C.A., José Luis De la Paz, y Raúl De la Torre, exasesor de Petroecuador y familiar del contralor (s) Pablo Celi, uno de los procesados en este causa, aparecen en varias oportunidades registrado los nombres “Santiago”, “Santi” e incluso “Santiago Cuesta”.
Por ejemplo en una conversación cuenta De la Torre de que el entonces gerente de Petroecuador, Pablo Flores, le pidió disculpas pues estaba recibiendo presiones de altas autoridades y que incluso Flores estaba a nada de hacerse a un lado del cargo “para que se hagan las cosas que se tengan que hacer.
De la Torre le dice a De la Paz que Flores ha recibido “órdenes de Santiago” y “órdenes del otro amigo”. “El man no se va a ir en contra de eso jamás y está que se caga del miedo con mi tío”, le dice Raúl De la Torre.
Para Pablo Flores, Agusto Briones y Cuesta fueron dos de las personas que “intercedieron” para que De la Torre no sea separado del cargo de asesor en Petroecuador al que ingresó en 2018.
De la Torre fue sentenciado en Estados Unidos en 2019 luego de haber aceptado ser parte de un esquema de sobornos al interior de la estatal petrolera ecuatoriana. Junto a él, la justicia estadounidense condenó al empresario inmobiliario Roberto Barrera.
El 19 de abril pasado, el empresario Barrera en su versión en el caso Las Torres reconoció saber que el exgerente Pablo Flores quería separar de la asesoría en Petroecuador a Raúl De la Torre. Según Flores, Barrera fue quien le recomendó contratar como asesor a De la Torre y además fue otro de los que intercedieron para que no lo saque del cargo como asesor.
A la consulta hecha por la Fiscalía, Barrera contestó que en una ocasión De la Torre le contó que Flores lo iba a separar de la asesoría, pero que él hizo una llamada telefónica a alguien de la Presidencia y que casi de inmediato llamaron a Pablo Flores desde esa instancia para que no lo haga y lo mantuvieron en el cargo, hasta que fue detenido.
La defensa de Santiago Cuesta, Jorge Acosta, asegura que fue el exgerente Flores quien llamó a su cliente y lo que ahí se trató nada tuvo que ver con facturas, con órdenes de pago o algún ilícito. Respecto de las veces que se le nombra en los diálogos transcritos, el abogado dice que se habrían tomado el nombre de Santiago Cuesta para generar una especie de temor y así lograr los propósitos de esta gente que usaba de forma irregular el nombre del entonces funcionario público.