Antes de que el Consejo Nacional Electoral (CNE) declare el inicio del periodo electoral para organizar el proceso eleccionario del 2023, el Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (CPCCS) prevé realizar el sorteo público para definir a los consejeros electorales, principales y suplentes, que culminarán sus funciones, como parte de su renovación parcial.
Esta renovación parcial responde a lo determinado en el artículo 218 de la Constitución por la que el CNE se renovará parcialmente cada tres años: dos consejeros (principales y suplentes) en la primera ocasión y tres en la segunda.
El CPCCS está organizando el concurso público de oposición, méritos e impugnación ciudadana, que no ha avanzado ni en la conformación de la comisión ciudadana, que será la encargada de elegir a las nuevas autoridades.
El reglamento vigente para ese efecto determinó que después del 20 de noviembre se realizaría el sorteo para escoger a las autoridades que terminarán su periodo.
Desde entonces, la realización de ese evento se ha manejado con hermetismo, pero el vicepresidente del CPCCS, David Rosero, confirmó que en los próximos días se aspira a efectuarlo.
Esto implicará hacerlo antes de que el CNE entre en una fase de periodo electoral para organizar las elecciones seccionales del 2023, en las que también se elegirá a los siete vocales del CPCCS, que se declararía, según un proyecto de calendario interno, este 26 de febrero o incluso en los primeros días de ese mes.
La decisión toma fuerza bajo la sombra de la disposición contemplada en el artículo 16 del Código de la Democracia por la que “ninguna autoridad extraña a la organización electoral podrá intervenir directa o indirectamente en el desarrollo de los procesos electorales ni en el funcionamiento de los órganos electorales”.
Pero según Rosero, hacer el concurso es una atribución constitucional y legal, lo que no significa “interferir en las elecciones, sino avanzar en la designación”.
Por el momento, los cinco consejeros principales (Enrique Pita, José Cabrera, Diana Atamaint, Esthela Acero y Elena Nájera) y los cuatro suplentes (Mónica Noriega, María Cristina Kronfle, Xavier Torres y Andrés León) están en funciones prorrogadas, debido a que el CPCCS se tardó en renovar el organismo, pues el plazo se cumplió en noviembre del 2021, al consumarse los primeros tres años en funciones.
La Procuraduría General del Estado amparó la prórroga hasta que se designe a sus remplazos, y que el Consejo no se vea afectado en su funcionamiento.
A criterio de Rosero, hacer este sorteo en los próximos días permitirá “visualizar para qué vamos a hacer el concurso. Es decir, si para elegir a dos mujeres, dos hombres, o un hombre y una mujer, respetando la paridad de género”.
Para ello, el reglamento fijó tres reglas: si resultan sorteadas dos mujeres para terminar su periodo, se designaría en sus remplazos a los dos candidatos mejor puntuados, “de los cuales al menos una deberá ser mujer”.
Con esa regla no se elegiría a dos mujeres, sino a un hombre y una mujer; y el pleno del CNE tendría una estructura de tres hombres y dos mujeres.
La segunda regla es que, si son sorteados un hombre y una mujer, en su remplazo “al menos uno deberá ser hombre”. Por lo que serían tres mujeres y dos hombres los que estarán en funciones.
La tercera opción señala que, si son sorteados dos hombres, se elegirá a dos hombres.
La metodología que propone Rosero es hacer una “lotería” que consistiría en la asignación de un número en cualquier orden a los vocales del CNE, que podría ser en orden alfabético. “Van saliendo los números de izquierda a derecha y en función de esos números, se podría poner a las personas que salgan sorteadas”, explicó.
Otra de las propuestas habituales, es el uso de pelotas colocadas en un ánfora que, con la presencia de un notario público, sean escogidos por los veedores ciudadanos o hasta periodistas que asistan al acto.
La posibilidad de ejecutar este sorteo se da en medio de un ambiente conflictivo en el CPCCS, en el que la mayoría que lideraba la presidenta Sofía Almeida con Javier Dávalos y Rosero perdió el voto de respaldo de la consejera Ibeth Estupiñán.
Rosero hace un llamado a la “cordura” de sus colegas para avanzar en los procesos, ya que, según sus observaciones, los seis concursos de designación de autoridades que se convocaron en el 2021 han avanzado en el 40 %. Esto porque no se ha concretado la conformación ninguna de las seis comisionadas ciudadanas que se encargarán de elegir a los nuevos funcionarios.
A esta división interna entre sus siete miembros, Almeida insistió al Gobierno nacional, en un oficio remitido al Ministerio de Economía y Finanzas, que asigne un presupuesto de $ 372.235 para hacer el concurso de renovación del CNE.
Ella expuso al régimen que desde agosto del 2021 que se hizo el requerimiento no han tenido respuesta. (I)
Fuente: El Universo – Nota original: LINK