El volcán Sangay mantuvo este 5 de noviembre una nube de ceniza sobre algunas provincias del país. En un último informe diario del Instituto Geofísico sobre la evolución del coloso, indicó que el Sangay mantiene una actividad “alta” en la superficie y en su interior, con una “tendencia ascendente” en ambos casos.
Se han registrado 82 explosiones relacionadas con la salida de gases y ceniza, precisó el IG en su reporte. Caída de ceniza En el informe se indica que se han activado cinco alertas de emisión de ceniza detectadas por satélites. Esta actividad ha formado una columna de 2.070 metros de altura sobre la cumbre y con una dirección hacia el noroeste por efecto del viento.
Además, se ha reportado caída de ceniza, entre fuerte y moderada, en Chimborazo y Bolívar. Otras provincias donde cayó este material son Guayas y Los Ríos. El IG también calcula que las emisiones han generado un promedio de 1.716 toneladas de dióxido de azufre (SO2).
En la noche se ha podido observar un brillo de incandescencia a nivel del cráter. Además, se ha registrado el descenso de “flujos piroclásticos” (material magmático) que han bajado por la ladera. Según las imágenes de los satélites, la columna de emisión de ceniza se dirige al océano Pacífico, tras cruzar Manabí (oeste).
Actividad desde 2019 El Sangay, de 5.230 metros de altitud y activo desde 2019, se ubica en un ramal andino de entrada a la Amazonía. El volcán forma parte del medio centenar que posee el país, la mayoría en la denominada Avenida de los Volcanes, en la zona andina. Según varios investigadores, el Sangay debe su nombre a la voz kichwa (quichua) “samkay”, que se traduce como “espantar” o “aterrorizar”. Aunque, también podría provenir del vocablo de la etnia shuar “shanga”, que se interpreta como “bondadoso”.
Fuente: Primicias – Nota original : LINK